Han sido semanas de sufrimiento, trabajo y una dosis de ilusión, pero por fin lo hemos conseguido. Hemos logrado la aliviante, y triste a la vez, salvación. Estaremos otro año en Segunda División. Y serán ya 11.
11 años en la categoría de plata sin pena ni gloria, que, llegados a este punto, nos dormimos esperando a la siguiente, por si toca la flauta. Pero la flauta no se toca sola. La flauta se tiene que tocar. Hemos empezado con 2 de 21, hemos construído un equipo desde el principio, y nos hemos sobrepuesto a las adversidades. Hemos bañado al eterno rival... dos veces. Hemos ganado a grandes como al Real Zaragoza, dando la cara contra la Real Sociedad. Pero la flauta no se toca sola. Hemos descubierto que nuestro jugadores no eran de nivel de Segunda B, hemos descubierto que Sa´´ul, David Fuster y Santos son nuestras perlas, que la defensa con Niño, Samuel, Zubi, Rubio y Raúl Fuster es sólida salvo excepciones. Pero la flauta no se toca sola.
Es tiempo de recapacitar, de mentalizarse para hacer algo grande la próxima temporada, y sobre todo, acabar la presente lanzados. Hablando de mentalizarse, quizá los primeros que deberíamos hacerlo es la afición, que nos hemos degradado estos últimos años. Hay que volver a hacer que aquellos que renegaron, vuelvan a creer.
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Hace 5 años
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